Por la ruta de las 1000 Kasbahs marroquíes
Por la ruta de las 1000 Kasbahs: En Marruecos abundan tesoros arquitectónicos únicos como las Kasbahs. Descubra estas ciudadelas y déjese hechizar por su encanto intemporal.
Enclavadas entre la majestuosa cordillera del Atlas y las extensiones desérticas del Sáhara, las kasbahs de Marruecos se erigen como centinelas, testigos del genio arquitectónico y el esplendor de las dinastías que las construyeron. Cada kasbah tiene su propia historia, su propia identidad, y le invita a una cautivadora exploración de sus rincones secretos y tesoros ocultos.
Conocerá las peculiares tradiciones y costumbres de los habitantes de estas zonas mientras recorre la Ruta de las 1000 Kasbahs. Conozca a los artesanos locales, pruebe las delicias de la cocina marroquí y déjese llevar por los cantos y bailes tradicionales. Explore ahora mismo nuestro programa para visitar las kasbahs más exquisitas de Marruecos.
Descubra la encantadora belleza de la Kasbah de Amridil:
Déjese seducir por la majestuosa kasbah de Amridil, en el corazón del espléndido palmeral de Skoura. A sólo 30 kilómetros de Ouarzazate se encuentra esta emblemática kasbah del siglo XVII. La Kasbah de Amridil es un enorme palacio de tierra de varios pisos que se ha conservado en muy buen estado y que recuerda su antiguo esplendor. Su arquitectura de adobe, sus patios interiores y sus verdes jardines le sorprenderán.
Además, el lugar ha sido escenario de numerosas películas, como “Lawrence de Arabia” y “Alí Babá y los cuarenta ladrones”. La Kasbah de Amridil también aparece en los billetes de 50 dirhams, símbolo de su importancia cultural. Una vez que haya estudiado su historia y la disposición de sus numerosas residencias, no deje de visitar el palmeral de Skoura, famoso por su inmensidad y profusión de vegetación.
Kasbah Ait Ben Haddou, una joya arquitectónica:
Situada también a unos treinta kilómetros de Ouarzazate, en el sublime valle de Ounila, es sin duda una de las más pintorescas del sur de Marruecos. Desde 1987, está reconocido como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. También ofrece una visión de una época pasada, cuando las caravanas unían Marrakech con el Sáhara. Al pasear por sus callejuelas, descubrirá pequeños muros de luz y bancos tradicionales, ideales para empaparse del paisaje.
Esta Kasbah era antiguamente un granero compartido donde se guardaban alimentos y agua. Gracias a una meticulosa conservación, aún hoy se puede apreciar su autenticidad arquitectónica, tanto en la forma como en los materiales. Los cinéfilos la reconocerán como escenario de muchas películas famosas, como Gladiator, Juego de Tronos, El Reino de los Cielos, Lawrence de Arabia y El Príncipe de Persia, por citar sólo algunas. En resumen, Kasbah Ait Ben Haddou es un tesoro cultural que no debe perderse cuando explore las kasbahs marroquíes.
Kasbah de Taourirt, un lugar virgen por descubrir:
Por la ruta de las 1000 Kasbahs: Descubra la Kasbah de Taourirt, un tesoro arquitectónico del siglo XVII situado en la ciudad de Ouarzazate. Esta magnífica construcción de adobe le sumergirá en el corazón de la historia y la cultura marroquíes. A través de su laberinto de pasillos, se encontrará transportado a un majestuoso laberinto de casi 300 habitaciones, salones de recepción y apartamentos privados.
También declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, la Kasbah de Taourirt fue antaño el hogar de Thami El Glaoui, poderoso señor del Atlas y pachá de Marrakech. Sus murallas de color rojo bronce, que recuerdan a los castillos de arena, se elevan hacia el cielo con sus torres almenadas. Una visita a la Kasbah de Taourirt ofrece una verdadera inmersión en la vida de antaño.
Un viaje en el tiempo en la Kasbah Tamnougalt:
Construida en el siglo XVI cerca del Oued Draa, esta kasbah fue en su día la capital de la tribu Mezguita. De hecho, sirvió como punto estratégico de defensa y encrucijada comercial esencial entre Tafilalet y Tombuctú.
Así pues, prepárese para dejarse seducir por la magnificencia de la puerta monumental, parcialmente enterrada por la arena. Abre la puerta a un verde palmeral y al Oued. El caïd (sultán local) y el mellah (antiguo barrio judío) se alojaban en esta magnífica kasbah. Además, si puede, intente ir al mussem de Ellama la primera semana de octubre. Esta feria reúne a los pueblos de los alrededores y ofrece una experiencia cultural única y auténtica.
Kasbah Oulad Othmane, una opción de alojamiento menos conocida:
Situada cerca de la pintoresca ciudad de Zagora, en el valle del Drâa, se encuentra la fortaleza Oulad Othmane, del siglo XVIII.
No obstante, una parte de la kasbah se ha convertido en un hotel con habitaciones en suite y piscina al aire libre. Desde la Kasbah también se puede disfrutar de impresionantes vistas sobre un frondoso palmeral, creando un entorno idílico para una escapada atemporal. Al alojarse en la Kasbah Oulad Othmane, disfrutará de una experiencia única que combina historia, cultura y comodidades modernas.
Kasbah de Tifoultoute para una experiencia de maravilla garantizada:
Por la ruta de las 1000 Kasbahs: Las kasbahs más bellas de Marruecos se encuentran en los alrededores de Ouarzazate, y ésta no es una excepción. Situada a sólo 8 km de la ciudad, la majestuosa kasbah de Tifoultoute ofrece a los visitantes una vista panorámica que se extiende hasta el Alto Atlas. Además, desde lo alto de las murallas, podrá observar a sus anchas el oasis de Drâa y el Oued Ouarzazate.
La Kasbah de Tifoultoute es también un lugar de rodaje muy apreciado por numerosos cineastas marroquíes e internacionales. Para los amantes de las emociones fuertes, las actividades en moto, quad o buggy ofrecen recuerdos inolvidables. Por último, si prefiere descubrir la región de un modo más tradicional, podrá realizar excursiones en camello que le permitirán sumergirse en el corazón de la región y sus tesoros.
Kasbah Amezrou y sus tesoros preservados:
En una colina al sur de Zagora, en el corazón de un frondoso palmeral, se encuentra la kasbah Amzrou. Construida en el siglo XVIII, es un magnífico ejemplo de la arquitectura histórica del sureste de Marruecos. En el interior de la kasbah, descubrirá un gran pueblo fortificado aún habitado, pero también bien conservado. Y no olvide echar un vistazo a la antigua mellah, testigo de la numerosa comunidad judía del pasado, así como a la pequeña sinagoga, recuerdo de esta presencia.
Pero eso no es todo: una visita a la cooperativa artesanal Amezrou Zagora es también obligada. Aquí encontrará una selección de artesanía marroquí antigua, joyas de plata de fabricación local y puertas de madera tradicionales. Tanto si es un amante de la historia, la cultura o la arquitectura, esta kasbah le encantará.
Descubra las riquezas del pasado en la kasbah de Tamegrout:
En la ruta de las kasbahs de Marruecos, otra visita obligada es Tamegroutt. Situado a sólo 20 km al sur de Zagora, este pueblo se alza sobre el río Drâa. Es uno de los pueblos más antiguos y mejor conservados de la zona. En realidad, los callejones que antiguamente comunicaban las casas se han conservado, al igual que sus corredores cubiertos. Todavía se pueden ver las decoraciones murales y los patios interiores.
Pero Tamegrout es mucho más que una arquitectura única. También es famosa por su cerámica tradicional, con motivos de henna. Tamegrout también alberga una imponente biblioteca con más de 4.000 libros. Entre ellos, antiguos manuscritos sobre astronomía y matemáticas dan fe de la importancia intelectual de este pueblo.
Por la ruta de las 1000 Kasbahs
¿Está preparado para descubrir las 1.000 kasbahs de Marruecos? Este cautivador viaje promete una inmersión total en la historia, la cultura y la arquitectura de estos emblemáticos palacios fortificados. Deseamos que nuestra elección le haya inspirado para conocer mejor este itinerario tan singular. No dude en compartir sus sugerencias y sus propios descubrimientos en la sección de comentarios. Y ahora, díganos, ¿qué kasbah tiene más ganas de visitar?
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