Qué hacer en Errachidia, Marruecos

Qué hacer en Errachidia

La provincia de Errachidia

Qué hacer en Errachidia: La provincia de Errachidia ofrece un entorno natural rico en contrastes, pero también un viaje en el tiempo a través de su patrimonio histórico y cultural. Póngase en la piel de un tuareg y láncese a la aventura.

Historia

La provincia de Errachidia se creó en 1956 en las fronteras del sureste de Marruecos. Al este se encuentra la provincia de Figuig. Y Al Oeste, las provincias de Azilal y Beni Mellal. Al norte se encuentra la provincia de Boulmane, mientras que al sur, Errachidia limita con la frontera marroquí-argelina.

Los árabes solían llamar a la región Ksar Es-Souk. Los bereberes, en cambio, la llamaban Imetgharen. En 1975, la provincia recibió su nombre actual, Errachidia, en honor de Moulay Rachid ben El Hassan, príncipe alauita e hijo menor del rey Hassan II. Varios miembros de la familia real marroquí siguen viviendo en la capital del mismo nombre.

Tafilalet: cuna de la dinastía alauí

En la provincia de Errachidia se encuentra Tafilalet, una de las regiones históricas más importantes de Marruecos. Conocido como el mayor oasis del país, es también el lugar de nacimiento de la reina bereber Tin Hinan, a quien los tuaregs honran como su antepasado original. En la Edad Media, Tafilalet era una importante encrucijada en la ruta comercial del oro, las especias y la sal, así como del comercio de esclavos procedentes del Balad es-soûdân o Pays des Noirs (regiones de Níger, Malí y el Golfo de Guinea). En Tafilalet se encuentra la mítica ciudad de Sijilmassa, donde nació la dinastía alauí en 1631. El actual rey de Marruecos, Su Majestad Mohammed VI, es descendiente directo del fundador de la dinastía, Moulay Ali Charif (1588-1659).

Descubrir Errachidia

En la provincia de Errachidia, atravesará tanto inmensas zonas áridas como vastos palmerales. Los exploradores más aventureros podrán continuar hasta las cumbres nevadas del Atlas y las encantadoras dunas del desierto marroquí. El épico viaje puede parecer duro, pero afortunadamente los uadis Ziz, Guir y Ghris serpentean a través de la provincia y desembocan en el gran oasis de Tafilalet, donde podrá disfrutar de un refrescante descanso.

Tierra de historia

Las diferentes tribus que han vivido en la provincia de Errachidia han dado lugar a un impresionante mosaico de gentes y tradiciones, sobre todo en la gran zona de Tafilalet. Visite las ruinas de la legendaria ciudad de Sijilmassa, fundada en el siglo VII. La antigua capital comercial y cultural de Marruecos ha sido durante mucho tiempo el centro del comercio con el África Negra, el Magreb, Oriente y Europa.
Repartidos por toda la provincia, monumentos históricos y mausoleos hablan del próspero pasado de Errachidia. Las principales atracciones son

Los Ksours: pueblos fortificados típicos del norte de África, entre los que destacan el ksar el Fida (el más antiguo de los ksours alouitas de Tafilalet), el ksar Oulad Abdelhalim (sede administrativa, judicial y del consejo de guerra en tiempos de Moulay Rachid) y el ksar Abouaam (importante centro cultural en tiempos del sultán Moulay Ali Cherif);
Biblioteca Abou Salem
Mausoleo de Moulay Ali Cherif

La capital de provincia Errachidia

La capital homónima de la provincia de Errachidia fue desarrollada a principios del siglo XX por la Legión Extranjera francesa. Conservó su carácter militar incluso después de que Marruecos declarara su independencia. Numerosos soldados siguen patrullando la ciudad, vigilando la frontera con Argelia.

La ciudad de Errachidia está en pleno auge. Cuenta con una universidad de renombre con una facultad multidisciplinar. En el centro de la ciudad, alrededor de la estación de autobuses, encontrará todos los servicios necesarios para la vida cotidiana: correos, bancos, tiendas, etc. También hay un pequeño mercado cubierto, donde se puede degustar lo mejor de los productos locales los domingos, martes y jueves. A diferencia de sus alrededores, la ciudad no cuenta con grandes ejemplos de arquitectura local.

Errachidia

Si bien los días en Errachidia son bastante tranquilos debido al sol, las noches presentan un ambiente diferente. Las familias salen de sus casas para pasear por el “rond-point” y disfrutar del frescor del jardín al pie de las palmeras datileras. Pero si de verdad quiere ver cómo se enciende Errachidia, planifique su viaje para mayo, cuando su teatro acoge el famoso Festival du Désert, con artistas de todo el Sáhara.

Errachidia es el punto de partida de numerosas excursiones apasionantes, como las dunas de Merzouga, los palmerales de Goulmima y Ziz, el lago Tifounacine, el valle de Gheris, el manantial azul de Meski y montañas de más de 3.200 m de altitud. A sólo 12 km, se encuentra el embalse de la presa de Hassan-Addakhil, que, con sus aguas verdes y su terraplén de tierra escarlata, es un lugar ideal para hacer fotos. Más lejos, las ciudades de Rich (60 km al Norte) y Erfoud (70 km al Sur) muestran otra cara del Marruecos tradicional. En ellas, el tiempo parece haberse detenido y es frecuente cruzarse con mulas, caballos y burros por las calles.

Información práctica

¿Cuándo visitarla?

Errachidia es conocida como “la provincia de los 330 días de sol”. La región tiene un clima semidesértico con una fuerte influencia continental. Las temperaturas se caracterizan por grandes variaciones estacionales y diarias. A lo largo del año, el termómetro marca una media de 20°C. No llueve mucho en Errachidia, con una media de 25 días al año y un índice de precipitaciones de 120 mm.

Cómo llegar

Errachidia se encuentra en la Route Nationale 10, que une Agadir con Bouarfa, pasando por las ciudades de Taroudant y Ouarzazate. La provincia cuenta con un aeropuerto conectado con Casablanca, pero su uso se limita generalmente a eventos y viajes privados.

Desplazamientos

Según el lugar donde se encuentre, puede desplazarse por Errachidia en quad, moto, coche o camello (o simplemente a pie).