Visita Errachidia, viajes a Marruecos

Visita Errachidia, viajes a Marruecos

Errachidia

Visita Errachidia: La antigua ciudad de Ksar Es-Souk está situada a 1.010 metros de altitud, en una región árida a los pies del Atlas. Habitada por la tribu Aït Yafelmane, sirvió de base a la Legión Extranjera Francesa durante el protectorado francés hasta 1956.

Fue construida a principios del siglo XX en estilo militar, con calles rectas y bien planificadas.

Está situada a orillas del río Ziz, que trae el agua del deshielo de los glaciares del Atlas y forma un estanque. El río muere un poco más al sur, en el Sáhara.

Hoy es la capital de la región de Tafilalet y un importante centro administrativo, comercial, militar y universitario.

Sus valles figuran entre los oasis del sur de Marruecos declarados Patrimonio de la Humanidad, con abundantes yacimientos geológicos y minerales donde se cultivan palmeras datileras.

Toda la arquitectura tradicional de la zona se basa en el principio de fortificación.

La kasbah o tighremt es un edificio de varios pisos con torres en las cuatro esquinas y, en algunos casos, un patio central.

El alcázar (ksar o ighrem) es una villa amurallada con torres de vigilancia en varios puntos y una o varias entradas monumentales. En su interior, además de las casas, siempre hay una mezquita, un espacio para celebraciones y, a veces, una posada (fondouk).

Visita Errachidia

El clima es desértico, con inviernos fríos (las temperaturas descienden por debajo de cero) y veranos muy calurosos (40°). Las mejores estaciones son primavera y otoño.

Errachidia cuenta con un pequeño aeropuerto con vuelos regulares a Casablanca y vuelos chárter. Es una ciudad base y de partida para el turismo del desierto, hacia las dunas de Merzouga, Erfoud, Rissani, la Ruta de las Kasbahs, el Atlas o la meseta de Rekkan, con garajes para vehículos todoterreno.

Destaca el estanque Moulay Hassan Eddakhil. Con el contraste entre el azul de sus aguas y el ocre de las montañas, es un sitio de gran belleza. También es un lugar de descanso para las aves migratorias, y muy utilizado por los pescadores.

El desfiladero de El Kheng también merece una visita.

Cerca se encuentra el lago Ksar Jdid, una antigua mina de arena.

En mayo se celebra en toda la región del Tafilalet el Festival de Música del Desierto. Dura una semana y en él participan artistas de Arabia y África.

Artesanía

Visita Errachidia: La cerámica de la región se caracteriza por la ausencia de pintura ornamental, sino que está vidriada de forma natural.

En los oasis, la artesanía se produce para satisfacer las necesidades locales, así como las demandas de la población nómada de la región. La forja del hierro era específica de la población negra. La orfebrería fue, en otro tiempo, una especialidad de los hebreos, además de la carpintería y la talabartería.

Las mujeres, por su parte, tejían alfombras o mantas y bordaban haiks, no de forma profesional sino como actividad complementaria a su trabajo doméstico. Alfombras, tejidos de lana (djellabas, handiras, burnous, hayeks) o joyas de plata con piedras semipreciosas representan algunas de sus actividades.

En las montañas cercanas abundan las plantas aromáticas y medicinales que más tarde se encontrarían en las herboristerías tradicionales. Las hierbas se utilizan mucho en la cocina local, sin olvidar los magníficos dátiles.

Cerca de allí, podemos admirar yacimientos de fósiles de la era primaria, cuando la zona estaba sumergida bajo el mar.

Gastronomía

La base de la alimentación es la harina de trigo, maíz o cebada, con la que se elabora el pan y el cuscús. El cuscús es la comida estándar de la región.

A la hora de comer, se suele preparar un tajine con pan, verduras y trozos de carne cocinados en una mezcla de agua, aceite y numerosas especias.

Para dormir

El alojamiento en hoteles es bastante básico. El hotel más lujoso es el Kensi Rissani (4 estrellas), en el centro de la ciudad, junto al río; cerca están el Hôtel Vallée Ziz (3 estrellas), el Hôtel Kasbah Aferdou (3 estrellas), Le Riad (3 estrellas) y el Auberge Tinit, en la zona turística de la carretera de Ouarzazate.

También es posible dormir en campamentos turísticos en el desierto.

Recomendamos hoteles en los pueblos cercanos de Erfoud, Merzouga o Rissani.

Tinejdad

Visita Errachidia: Siguiendo la carretera principal a Ouarzazate (N-10) a lo largo del río Todra, llegamos al palmeral de Fekla, con su antigua Kasbah almorávide, y un magnífico hotel, el Gîte Elkhhobat, desde donde parte una carretera que lleva a Erfoud y senderos de montaña hasta Mesissi, en la carretera Rissani-Zagora. A la salida de Tinghir, nos encontramos con la Kasbah El Khobat.

En dirección a las montañas, llegamos al oasis de montaña de Aghbalou Kerdous. Es un lugar sublime y muy tranquilo, que se distingue por sus manantiales, cuevas y pueblos típicos bereberes.

CAMINO A FES

Las gargantas del Ziz, a 45 km en dirección a Fez, son la puerta histórica de Tafilalet. La carretera bordea un lago artificial a las afueras de la ciudad, donde se pueden admirar las Kasbahs Tirhiorite y Amezoudj, el paso del Ziz, palmerales, la Kasbah de adobe de Ifri y el túnel del Legionario, excavado en la caliza por los franceses durante el protectorado.

Por el camino, encontramos la Kasbah Hôtel Camping Jurassique (3 estrellas), en una zona donde se han encontrado restos de dinosaurios.

RUTA DEL TAFILET

Esta carretera sigue el valle bordeado de palmeras del río Ziz. A 18 km, en medio del palmeral, verá un manantial azul, un oasis de frescor y verdor en medio del desierto. Más arriba, en las montañas, se divisa el antiguo fuerte francés de Meski.

En dirección sur por el valle, pasamos por el palmeral de Aoufous, declarado Reserva de la Biosfera por la UNESCO, que destaca sobre el desierto y la hamada circundantes. Entre palmerales y jardines, podremos admirar varias kasbahs, entre ellas el antiguo palacio alauí de Maaka.

BOUDNIB

Visita Errachidia: A 93 km, encontramos un antiguo puesto militar que se estableció en este oasis por su situación geográfica estratégica para la penetración colonial de Marruecos. Se encuentra cerca del Sáhara, en la región de Tafilalet, cerca de la frontera con Argelia.

Es un lugar ideal para hacer un descanso cuando se viaja en todoterreno.

Aquí encontramos alojamiento rural: la Casa Rural la Posada.

En dirección norte, llegamos a la Kasbah de Tazourguerte y, tras atravesar Belkassen, llegamos a los pueblos de montaña de B. TAJJITE y TALSINNT, que adquirieron notoriedad tras el descubrimiento de petróleo hace unos años. Es un buen sitio para los amantes de los fósiles.

Estos senderos continúan hacia el norte por la meseta de Rekkam, una larga zona desértica poco transitada y habitada únicamente por pastores nómadas.

Desde aquí, en dirección Sur a través de una hamada rocosa, podemos llegar a Erfoud y Merzouga.

BOUANANE

Oasis situado a 140 km del río Guir, que tuvo su origen en un destacamento del ejército francés. Hoy en día, esta pequeña ciudad rural de carretera cuenta con hermosos paisajes de montaña y pequeños pueblos de estilo tradicional.

Aquí comienzan los senderos para vehículos todo terreno, así como una carretera que se dirige hacia el Norte a través de las montañas del Atlas, remontando el río y atravesando pueblos como Takoumit y Aourir, o la zona de minas de plomo de Morthel, donde se encuentra un fuerte francés.

Esta ruta continúa hacia Beni Tajjite, Talsinnt y Minsour, en el valle del río Mouluya.

MENGOUB

Puesto de control militar con la frontera argelina, a 225 km, junto al estanque de aves de Douiss. Se trata de un alto en el camino utilizado por los aficionados a los vehículos todoterreno.

Punto de partida de las rutas hacia el norte del Atlas sahariano, la meseta de Rekkam y Talsinnt.

La carretera atraviesa la llanura de Tamlelt, donde se han formado lagunas con la lluvia. Estas contrastan con el desierto y albergan numerosas aves. La zona está salpicada de dayas, depresiones donde se concentra la humedad y crece la vegetación (árboles).

BOUARFA

A 282 km, encontramos el antiguo centro minero de Manganeso y el final de la antigua línea de ferrocarril. Más tarde se convirtió en el centro administrativo y comercial de la región. También es un mercado de ganado.

La carretera termina en Figuig, a 390 km de la frontera argelina.