Guía de viaje de ciudades y regiones de Marruecos
Essaouira Marruecos
Guía de viaje de ciudades: Essaouira está situada a orillas del océano Atlántico. Puerta de entrada al sur marroquí, Essaouira es famosa por la hospitalidad de sus habitantes, su clima suave, sus excepcionales elementos arquitectónicos que se remontan a civilizaciones de todo tipo y sus vientos constantes, que atraen cada año a más aficionados a los deportes náuticos.
Fundada en el siglo VII a.C., fue a su vez fenicia, bereber y romana. En el siglo XV pasó a ser portuguesa, y su puerto fue un importante puesto comercial. .En aquella época se llamaba Mogador, nombre que ha perdurado hasta nuestros días.
En 1764, el sultán Sidi Mohamed Ben Abdallah decidió construir un nuevo puerto decididamente orientado hacia Europa. Llamó a un francés, Théodore Cornut, que trazó los planos de la ciudad tomando como modelo la ciudad fortificada de Saint Malo, en Francia.
Essaouira es así una de las pocas ciudades del mundo que fue diseñada antes de ser construida, lo que le valió su nombre, Es Saouira, que significa la Bien Trazada. Hasta principios del siglo XX, Essaouira desempeñó un importante papel como puerto internacional de comercio con el resto del mundo.
Essaouira
Guía de viaje de ciudades: Desde 2001, la Medina de Essaouira está inscrita en la Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO. Usted también podrá maravillarse con esta ciudad, fruto del encuentro de todas las civilizaciones humanas y hogar de un patrimonio arquitectónico de gran originalidad. Monumentos históricos de las principales culturas del mundo conviven en paz frente al océano que siempre ha inspirado a la ciudad.
La Medina es el corazón de Essaouira, testigo de su glorioso pasado. Disfrutará de su encanto discreto y relajante, ajeno al turismo de masas. Aquí podrá descubrir la joyería mogadoriana, una artesanía que combina motivos decorativos excepcionales y magníficos. La marquetería de madera de tuya, desarrollada por los artesanos souiris, se ha elevado a la categoría de arte en Essaouira. Otras especialidades son el famoso aceite de argán y la alfarería.
La nueva ciudad junto al océano alberga hoteles y riads. Destino turístico predilecto, la Ciudad de los Vientos o Ciudad de los Alisios es mundialmente conocida por la práctica del windsurf y el kitesurf, gracias a los vientos que soplan regularmente en la bahía. Essaouira es la capital marroquí de los deportes náuticos.
Pero quizá prefiera pescar en las reservas de peces cercanas o asistir al festival internacional de Gnaouas, uno de los más populares de Marruecos.
Ciudad de Errachidia Marruecos
Errachidia, en la región presahariana de Tafilalet, al sureste de Marruecos, se encuentra en el valle del Ziz, entre las montañas del Alto Atlas y las colinas arenosas del desierto, en un paisaje de rocas y campos de piedra. Oasis de 45.000 habitantes en el desierto, la ciudad se ha preservado de las influencias extranjeras para crear un entorno único. Las numerosas palmeras datileras detrás de las murallas y las montañas rojas a veces cubiertas de nieve contrastan con las dunas de arena.
Aunque esté situada en una zona sahariana, encontrará todas las comodidades que puede ofrecer una ciudad: hoteles y kasbahs le permitirán disfrutar de una estancia inolvidable en eloasis, desde donde podrá emprender excursiones por el sureste de Marruecos.
Errachidia tiene un clima desértico. El invierno es frío, con grandes diferencias de temperatura entre el día y la noche. Las mejores estaciones son primavera y otoño, con una temperatura media de 25 grados. El verano es caluroso, con el termómetro marcando a menudo más de 40 grados durante el día. Las tardes y noches de verano, en cambio, son muy agradables.
La tranquilidad de la ciudad durante el calor del día contrasta con la actividad y el bullicio que encontrará por las tardes. Hombres, mujeres y niños salen de sus casas para dirigirse a “la rotonda”, donde el jardín refrescado por la sombra de las palmeras datileras de la ciudad sirve de lugar de encuentro.
Errachidia
Guía de viaje de ciudades: El manantial azul de Meski se encuentra a 18 km de Errachidia y es de fácil acceso. Este manantial frío procede directamente de las montañas y desemboca en un estanque donde podrá darse un chapuzón, un lugar ideal para refrescarse en verano.
Las excursiones desde Errachidia le transportarán al Marruecos tradicional. La pequeña ciudad de Rich se encuentra a 60 km al norte de Errachidia, Erfoud a 70 km al sur. El estilo de vida de estas dos ciudades difiere del de Errachidia. Las condiciones de vida son más tradicionales y más pobres. En las calles, como si el tiempo se hubiera detenido, se ven muchos burros, mulas y caballos.
Ciudad de Erfoud Marruecos
Erfoud, un inmenso oasis, es la capital de la región de Tafilalet, al norte de Rissani. Creada por la instalación de una guarnición francesa en 1917, Erfoud debe su atractivo turístico a su situación estratégica en el corazón de la región del Tafilalet, a orillas del Oued Ziz, lo que la convierte en un excelente punto de partida para las dunas de Erg Chebbi. Sin embargo, sus calles anchas en ángulo recto y sus casas alineadas le quitan el encanto de las ciudades marroquíes tradicionales.
Sus palmerales y dunas ofrecen un paisaje impresionante. Descubra estos paisajes de cuento desde el borj, una torre fortificada junto al centro de la ciudad que ofrece una hermosa vista del palmeral y el desierto circundante.
En Erfoud, podrá vislumbrar la vida humana al borde de un desierto. Si se encuentra en Erfoud durante la tercera semana de octubre, podrá asistir al festival del dátil con sus exposiciones y espectáculos. No se pierda el palmeral, a 10 km de Erfoud, con sus frescas temperaturas durante el día.
A pocos minutos de la ciudad, podrá visitar el taller donde se trabaja el mármol negro, a veces con pequeños fósiles.
Desde Erfoud, se llega aErg Chebb, notable por sus dunas de arena dorada. El sol juega con las dunas en un juego de luces y sombras, sobre todo al atardecer. Desde el pueblo de Merzouga, puede adentrarse en el Sáhara, que se presenta enigmático y casi ilimitado.
A continuación, se puede llegar a la ciudad santa de Rissani, cuna de la dinastía alauí. De camino desde Erfoud, haga una parada en el yacimiento deSijilmassa, antigua capital de Tafilalet, de la que hoy sólo quedan algunos vestigios.
El Jadida Marruecos
Guía de viaje de ciudades: La ciudad costera de El Jadida es la capital de la provincia que lleva su nombre, a una hora en coche de Casablanca, a orillas del océano Atlántico. A pocos kilómetros, el mayor puerto mineral de África, Jorf Lasfar, se abre al comercio internacional. El Jadida es una ciudad histórica de la que se habla desde la época de los romanos y cartagineses, y que quedó marcada por la colonización portuguesa. Orson Welles rodó su famoso Otelo en la majestuosa cisterna portuguesa.
Usted también puede descubrir este majestuoso edificio que inspiró al gran cineasta. Durante mucho tiempo, los portugueses resistieron los asaltos marroquíes a la ciudad. Tuvieron que transformar la sala de armas de la Medina en una cisterna para almacenar agua potable para el asedio. El volumen de la sala, iluminado por la abertura de la bóveda y sostenido por 25 columnas que se reflejan en el agua transparente, transmite al visitante una sensación de frescor.
Visite los numerosos monumentos históricos de la ciudad y pasee por su puerto pesquero y deportivo. Si viene en julio, podrá disfrutar del espectáculo delMoullay Abdellah Amghar Moussem, celebrado desde hace cientos de años.
Se trata del mayor encuentro de caballos y jinetes de fantasía de Marruecos, que atrae a multitudes de todo el país. Una ocasión ineludible para participar en la tradición y autenticidad de las fiestas marroquíes.
Ciudad cultural, El Jadida es también una ciudad turística en pleno auge, con numerosos proyectos en curso. A orillas del magnífico saplage, numerosos hoteles le esperan para ofrecerle momentos de relax bajo el sol marroquí, en el clima templado que trae el océano: los veranos son frescos, los inviernos suaves.
Ciudad de Alhucemas Marruecos
Alhucemas está situada en la región del Rif, al norte de Marruecos, a orillas del Mediterráneo. Su clima estival cálido y seco y su belleza paisajística la convierten en una de las principales estaciones balnearias del país. Numerosas islas, como las diminutas islas Sabaadiya e islotes rocosos, emergen en la bahía de Alhucemas, que forma parte del Parque Natural que lleva el nombre de la ciudad.
Este parque de 47.000 hectáreas abarca el macizo de Bokkoyas y la bahía junto al mar. El agua es cristalina, y la protección del parque favorece la presencia de una fauna submarina rica y diversa. Tres especies de delfines tienen aquí su hogar, y el parque ofrece cobijo a otras especies que ya no se encuentran en otros lugares, y que usted puede tener la suerte de ver aquí. Tierra adentro, el parque alberga un bosque rico en flora y fauna. Pinos, arces y cedros conviven en armonía.
La ciudad de Alhucemas es un destino turístico de primer orden, con numerosas playas de arena fina y espectaculares montañas que se precipitan al mar. Sus calles limpias y alineadas convergen en el centro de la ciudad, donde los parques y jardines son muy populares. Abajo se encuentra el puerto pesquero, uno de los mayores de Marruecos en cuanto a número de barcos y tonelaje de pescado traído del mar. En toda la ciudad se pueden degustar excelentes platos de pescado a precios muy razonables.
Alhucemas
La amabilidad y hospitalidad de sus habitantes, la belleza de sus paisajes, hoy protegidos, y su proximidad a Europa hacen de Alhucemas un destino vacacional ideal. La artesanía marroquí también se puede encontrar en los zocos de la ciudad, que son otro punto de atracción.
En febrero de 2004, un violento terremoto destruyó parte de la ciudad, que está siendo reconstruida gracias a un amplio programa de construcción de viviendas e infraestructuras puesto en marcha por Marruecos.
Ciudad de Agadir Marruecos
Guía de viaje de ciudades: La Perla del Sur, o la ciudad blanca junto al mar, se llama Agadir. Enclavada en una magnífica bahía, la más soleada del mundo, Agadir es la capital y el puerto de la región más fértil de Marruecos. Huertas y frutales cubren el paisaje, convirtiéndolo en el vergel de Marruecos, el Souss.
Agadir posee el mayor parque hotelero del país, con 20 kilómetros de playas bien cuidadas que hacen las delicias de los veraneantes durante todo el año. Una avenida de varios kilómetros bordeada de palmeras permite pasear por el paseo marítimo en un ambiente de estación balnearia decididamente europea, donde se codean hoteles, restaurantes y cafés.
Destino ideal de vacaciones, Agadir es también un lugar ideal para explorar los alrededores, en particular el Parque Nacional de Souss Massa. Entre la moderna estación balnearia y el interior se entremezclan varios mundos: zocos rurales, aldeas solitarias en las montañas, viviendas tradicionales atemporales, huertos y jardines.
En febrero de 1960, un gran terremoto destruyó gran parte de la ciudad. Agadir fue reconstruida en dos años según un moderno plan de urbanización… y cumpliendo las normas antisísmicas. Abierta al mundo, Agadir es una ciudad activa, con su propio festival cultural internacional. La población vive del turismo, la pesca y actividades industriales como la conservera. Agadir es el primer puerto pesquero de Marruecos.
El centro de la ciudad está repleto de lugares de interés: el Valle de los Pájaros, la Kasbah con su magnífico panorama desde lo alto de una colina, el museo Bert Flint de arte bereber y la Medina Polizzi, donde encontrará artesanos vendiendo sus especialidades.
Pueblo de Merzouga Marruecos
El pueblo de Merzouga, en el sureste de Marruecos, es famoso por sus altas dunas de arena ocre en elErg Chebbi, que ofrecen una vista excepcional al amanecer y al atardecer. El color rojo de la arena juega con la luz y las sombras para crear un espectáculo grandioso.
Merzouga es el punto de partida de excursiones en camello por el desierto, que recomendamos a primera hora de la mañana o a última del día. Aquí podrá experimentar una noche bajo las estrellas en el desierto, donde descubrirá de repente lo brillante y multicolor que puede ser el cielo, lejos de cualquier contaminación en el aire limpio.
Merzouga se ha hecho famosa por sus insólitos baños de arena, que tienen lugar en pleno verano. A la arena cargada de cristales y con un 20% de agua se le atribuyen virtudes terapéuticas, según los numerosos aficionados a estas curas, que suscitan el interés de los medios de comunicación y la comunidad científica. Los médicos supervisan a sus pacientes, que se bañan durante las horas más calurosas del día. Tras unos minutos de inmersión, en los que permanecen tumbados bajo la arena y beben abundante agua bajo la sombrilla que les protege la cabeza, descansan a la sombra antes del siguiente baño, que se repite a la hora siguiente o al día siguiente.
Merzouga se organiza para acoger el turismo de dunas, donde conocerá a los nómadas y sus costumbres saharianas, la música y la suculenta cocina local.
Las dunas de Merzouga son un oasis. La densa vegetación en el corazón de las dunas no dejará de sorprenderle, y podrá cruzarse con especies de aves que sólo viven aquí. Hay momentos en los que el asombro se une a la maravilla, y Merzouga es el lugar ideal.
M’hamid, pueblo de Marruecos
M’Hamid es uno de los dos lugares de Marruecos donde comienza el Sáhara, el otro es Merzouga. Es el último de los oasis, donde elOued Drâa se hunde definitivamente bajo la arena para resurgir en la costa atlántica 800 km más allá. M’Hamid fue un importante centro caravanero. Su ksar, cuyas ruinas se pueden visitar, recuerda su antiguo esplendor. Foum-Rjani, una de las necrópolis protohistóricas más antiguas del Norte de África, se encuentra cerca de M’Hamid y da fe de ello: los orígenes de la ciudad se remontan probablemente a la época en que el Sáhara aún no era un desierto.
Desde M’Hamid se pueden recorrer 60 km hasta Erg Chigaga, donde se encuentran las dunas más grandes de Marruecos. También puede embarcarse en una excursión por el desierto en camello, 4×4 o quad. Para vivir una experiencia única en el desierto, pase la noche en una tienda nómada en las dunas, a 7 km, y maravíllese con el cielo nocturno visible sin contaminación atmosférica.
Descubra los 7 pequeños pueblos que componen M’Hamid: R’Gabi, Ouled Driss, Bounou, M’Hamid nouveau, M’Hamid ancien y Ouled Mhya. Aquí se alternan influencias árabes, bereberes, judías y saharauis, y se siente la historia de las caravanas a través de África.
M’hamid
Guía de viaje de ciudades: M’Hamid destaca por su ubicación en la frontera del Sáhara. La carretera asfaltada desaparece en la plaza central, considerada por el reino marroquí zona fronteriza. Por ello, las entradas y salidas del lado saharaui de la ciudad están vigiladas por la policía. Los habitantes de M’Hamid son descendientes de nómadas. Han conservado su conocimiento del desierto y las dunas, y un gran orgullo por sus raíces.
Punto de partida de aventuras y sueños, el éxito de M’Hamid se debe, a día de hoy, a las recomendaciones y al boca a boca. M’Hamid da una calurosa bienvenida a los viajeros que vienen aquí en busca de naturaleza y turismo respetuoso con el medio ambiente fuera de los caminos trillados.
La ciudad de Marrakech
La ciudad de Marrakech y sus atractivos turísticos
Le presentamos la ciudad de las mil y una noches, Marrakech, sus atractivos turísticos y sus monumentos históricos. Esta ciudad imperial, rica en historia, es un lugar mágico que combina refinamiento, autenticidad y modernidad, todo ello alimentado por un clima estival durante todo el año. Muchos de los más de 2 millones de turistas que visitan la ciudad cada año lo hacen atraídos por la curiosidad de sus monumentos históricos, palacios, jardines, zocos y lugares religiosos.
Breve historia de Marrakech
Fundada en 1071 por Youssef Ibn Tachfin, Marrakech, ciudad imperial con diez siglos de historia, se enorgullece de haber dado nombre a su propio país, Marruecos. Aún dudamos entre sus dos apodos, la Ciudad Roja o la Perla del Sur, así que quedémonos con los dos.
Cálida y acogedora, Marrakech es sede de numerosos festivales de arte y cine. La atmósfera, los colores y el clima nos recuerdan que el desierto está a tiro de piedra, pero la vegetación es omnipresente, regada por las aguas del Atlas, que se cubre de nieve en invierno.
¿Qué hay que ver en Marrakech?
La ciudad cuenta con numerosos monumentos que no debe perderse:
La plaza Jemaa-el-Fna:
Al final del día, hacia las 17 h, esta plaza se convierte en una auténtica bola de encantadores de serpientes, restaurantes ambulantes, artistas del tatuaje, música oriental y mucho más. El bullicio omnipresente despertará todos sus sentidos.
La medina y el zoco:
Visitar la medina de Marrakech es como retroceder en el tiempo entre 1070 y 1269, cuando la economía y la política eran el centro principal del Occidente musulmán. Por no hablar de los zocos de Marrakech que atraviesan esta antigua ciudad, hogar de más de 2.600 artesanos marroquíes.
El Palacio de la Bahía:
Si desea visitar una obra maestra de la arquitectura marroquí clasificada como uno de los principales momentos del patrimonio cultural que le transportará a un lugar de lujo y refinamiento, tómese su tiempo para pasear por sus 8 hectáreas de extensión construidas para Si Moussa entre 1866 y 1867, chambelán del Sultán Hassan1 de Marruecos.
El Jardín Majorelle:
Una mezcla de azul y amarillo le conducirá directamente a la villa del pintor Jaques Majorelle, rodeada de su jardín botánico lleno de arte y movimiento.
Mezquita Koutoubia:
Esta mezquita es una oportunidad para visitar un lugar religioso que mezcla diferentes estilos arquitectónicos, con su minerait de 69 m de altura visible desde la plaza Jemaa-el-Fna.
Museo Dar Si-Saïd:
Descubra un museo construido a finales del siglo XIX en el que se expone el arte marroquí en sus múltiples formas: cerámica, tejidos, armas, alfombras, joyas y trabajos en madera. Es un encanto para la vista.
Sin embargo, nuestra lista de atracciones turísticas no es en absoluto exhaustiva.
Un poco antes, sin duda habrá paseado o se habrá perdido, según su estado de ánimo, en el zoco de la ciudad. Sus laberintos y puestos se prestan a la improvisación. Pantuflas y hojalateros se codean en los laberintos, callejuelas y calles cubiertas, creando un ambiente sorprendentemente animado.
¿Por qué visitar Marrakech antes que otras ciudades marroquíes?
Guía de viaje de ciudades: La ciudad de Marrakech está llena de sorpresas, le ofrece un cambio de aires y una gran riqueza de tesoros. Ya sea durante un fin de semana o varios días, en hotel o riad, una visita a esta ciudad es una oportunidad para descubrir lo mejor de Marrakech: una nueva cultura, la cocina oriental con sus numerosos platos dulces y salados, danzas folclóricas impregnadas de la historia de diferentes regiones y paisajes desérticos igual de llenos de flores.
Entre visitas a monumentos y jardines, paseos por la medina, compras en los zocos, no olvide relajarse en el hammam. Y haga de Marrakech su punto de partida estratégico para realizar excursiones al desierto, al Alto Atlas o a las playas meridionales de Agadir y Essaouira. Según su estado de ánimo, no se arrepentirá de su elección.